Cuando se es piercer o tatuador, profesionalmente hablando, creo que ante todo el trabajo bien hecho es lo que ha de imperar.
En situaciones como las que he vivido en ésta semana, en las que hay menos trabajo del habitual, como suele ocurrir cada año llegado el tiempo del inicio de la universidad, fin de las vacaciones, etc. me permite sin embargo, hacer algo que al llegar a casa tenga la satisfacción de ver el trabajo bien hecho.
Mi objetivo principal, es el servicio añadido que ha de recibir un cliente. La atención personal. En todo momento.
Eso ocupa tiempo. Bastante realmente. Y en muchas ocasiones, el propio cliente no quiere interferir en el tiempo del profesional si le ve muy atareado atendiendo a otros clientes etc. pero siempre que lo intentan saben que les voy a dar mi atención personal con el fin de poder solucionar aquello que les preocupa y por lo tanto, preguntan.
Así precisamente, en días como los de ésta semana actual, que el trabajo merma, los clientes que vienen, y no todos a tatuarse o a perforarse, tiene la oportunidad de entablar una conversación que con la tienda llena de gente, no hubieran podido. Quejas de otros sitos donde perforan o tatúan, agradecimientos por parte de los clientes por que han leído los blogs y han salido de alguna duda que pudieran tener, interés por aprender a cambiarse un piercing que no se atreven a tocar, consultar si están haciendo bien la curación, etc.
Me piden permiso para poder estar en el momento de la perforación a su amigo/a, y poder grabar un vídeo del momento. A mí personalmente no me gusta salir en los vídeos que hacen pero sé que para ellos es una ocasión importante y la quieren recordar y compartir con sus amigos. Yo hice lo mismo cuando me perforaron el pezón por primera vez, solo que fue un reportaje de fotos. Que lo podéis ver todos colgado en la pared del studio de Castellón.
Agradecer así a todos los que estáis mostrando interés real por el buen hacer del piercing que estáis curando.
Si alguna vez, notáis que no estoy haciendo como hasta ahora, por favor, no me lo ocultéis. Quiero seguir teniendo interés por vuestra perforación, cómo responde la piel a la curación, si está dando algún problema, etc. Y tanto si hemos sido nosotros los que os hemos puesto un piercing como si habéis acudido a algún otro sitio, que cada uno es libre de decidir dónde va, sentiros libres de consultar cualquier duda que tengáis. Y si véis la tienda llena de gente, no dejéis para otro día vuestra consulta. No nos molesta que os preocupéis por vuestra piel y el piercing que la adorna. -como profesional en la materia, sé lo importante que es el valor añadido del trato personal antes, durante y después de que vengáis a nuestras tiendas.
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